Como Ernesto Barón expresa, el objetivo de esta obra es intentar explicar el maravilloso paralelismo existente que hay entre el teatro tradicional con el estado físico, psíquico y transpsíquico de cada individuo.
De esta manera a través de los diversos capítulos Ernesto Barón nos invita a descubrir cual es nuestro auténtico papel en la vida, haciendo una reflexión sobre el Teatro de la Monotonía y el de la Revolución donde los personajes eligen su papel ya sea personalista o de entrega desinteresada, compañerismo, fraternidad o también El Traje que debemos usar.
En la segunda parte de este interesante libro, el autor nos explica las Clases de Teatros y de acuerdo a la participación y a los actores cómo pueden ser Personal, Múltiple, Universal etc.
La tercera parte nos lleva a analizar los tres arquetipos teatrales a través de los dramas, comedias y las tragedias como parte de toda actividad y existencia humana.
Como conclusión podemos decir que el conocimiento y estudio de esta obra del Teatro de la Vida nos abre las puertas al autoconocimiento y como su autor expresa: Todos nacimos para se algo que debemos ofrecer o construir, el punto clave está en encontrar esa fórmula específica.
